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Argentina con grandes ídolos y grandes vergüenzas

La Argentina es un país que se caracteriza por sus grandes ídolos en materia de fútbol y lo encabezan Diego Armando Maradona y Lionel Andrés Messi Cuccittini (Rosario, 24 de junio de 1987), más conocido como Leo Messi. Aunque Maradona no es un ejemplo de vida, estuvo metido en el tema de droga, entre otro, dejó a su país muy bien parado ante el mundo entero.

Hasta ahí todo bien, aunque los  argentinos que siempre son chantas, se sienten como reyes del mundo, pero a la hora de la verdad cuando tienen que recorrer sus territorios se “encuentran en la luna”. La mayoría de las rutas se encuentran en pésimas condiciones y cubiertas de “cráteres lunares”, una verdadera vergüenza.

Si las cubiertas y las suspensiones de los autos hablaran, contratarían a los haraganes que se hacen llamar piqueteros y cerrarían las calles de Buenos Aires e incluso la “Casa Rosada”, para que no sean siempre las principales víctimas de la inoperancias de  las autoridades del vecino país. Ante estos los logros de Maradona y de Messi, quedaron en sacos rotos.

Cualquiera diría que de nada sirve ser los campeones del mundo, traer los botines y balones de oro, cuando uno sale de la puerta de su casa y ya está empantanado en el charco o trancado en el más profundo de los pozos, además de a punto de pasar hambre, porque las autoridades no hacen nada o subsidian la sinverguencía. Los trabajadores argentinos ya están cansados de que los haraganes, los carceleros, los gays, entre otros “Próceres”, vivan en el limbo, mientras ellos tienen solo acumulan deudas y se quedan solo con el sudor de su frente.

El clientelismo político, especialmente del kisnerismo, hace que este país se convierte en cangrejo, en vez de ir para adelante acelera para atrás y cada vez este cayendo en picada. El ser campeón de mundo es un gran logro, pero las autoridades argentinas hacen que sea solo una gota en el desierto.

El sistema de vialidad en muy importante para el desarrollo de un país ya que permite el intercambio comercial, la entrada de turistas e inversores, entre otros. Sin embargo, esto parece no importarles a las autoridades Argentina.

Esta situación fue comprobada por “El Informante” durante un recorrido realizado entre Asunción y las provincias de Formosa, Santa Fe y Córdoba. El sistema vial, aunque en algunos tramos fue arreglado, la mayor parte, no solamente que es lamentable, sin un verdadero peligro y sobre todo vergonzoso.

Aunque Maradona ya pasó a mejor vida, Messi sigue luchando para dejar bien parado a su país. Sin embargo, para que Argentina pueda salir del pozo económico en el que está hundido, la selección debe estar integrada por todo el país, y en ella no deben entrar los haraganes que solo sirven de sanguijuelas.

Tomar las decisiones correctas está en manos de Alberto Angel Fernández, desde nuestra páginas, solo podemos darle un gran apretón de manos a los hermanos argentinos trabajadores e instarle a los haraganes a empuñar las armas del trabajo y levantar este hermoso país.